Hay cientos de definiciones de la autoestima, una de las que mas me gusta y refleja lo que supone la autoestima, es la que se expresa como fuerza innata que impulsa el organismo hacia la vida. La pérdida de la autoestima lleva irremediablemente a la depresión, hacia estados de letargo o de anidación emocional.

Los que hemos caido alguna vez en este estado sabemos que en algún momento sentimos que la vida se nos escapa y que pierde su importancia y se llega a perder el rumbo y el sentido para el que hemos venido. Y en los estados más graves la muerte se ve como una liberación.

Sigo pensando que una de las frases que integran al ser emocional es la de CONÓCETE A TI MISMO. A mayor conocimiento de uno mismo, más dificil es caer en la desestima (pérdida de autoestima), y si se cae por cualquier motivo, más fácil es salir de ella. Por eso la importancia del autoconomiciento.

Sin duda la autoestima es fundamental para alcanzar la felicidad, para respetarse y aceptarse   ( como bien dice Mónica Esgueva en su libro «Cuando sea feliz»).

El respeto tiene que venir de la compasión hacia nosotros mismos y del control de nuestro juicio interior que en ocasiones es enormemente severo. Hay personas que son durísimas consigo mismas y que desde patrones de conducta dirigidos hacia la crítica feroz por lo que hemos hecho terminan  machacándose sin darse cuenta que matan su autoestima. Esos pensamientos negativos repetitivos: !es que eres tonto!, !siempre te pasa igual!, ! no tienes remedio!…no sirven para nada, hay que aprender a mirarnos desde ese respeto y analizar el porqué hemos errado y aprender del error. A veces es necesario pedir ayuda para salir de situaciones difíciles… pues hazlo, no tengas miedo a enfrentarte a tí mismo.

Y atención a la aceptación… La aceptación no nos puede llevar al victimismo del «es que yo soy asi» » es que no tengo remedio». No es cierto. Ya nos ha demostrado la neurociencia que  podemos cambiar patrones de conducta, aptitudes y cambiar nuestra actitud. La plasticidad del cerebro así lo permite. Y situaciones repetidas durante años que pueden comportarnos sufrimiento podemos cambiarlas y convertirlas si nos dañan, en reacciones positivas.

CUANDO LA VIDA SE VIVE DESDE LA AUTOESTIMA TODO ES DIFERENTE.

UN SER HUMANO SIN AUTOESTIMA SE CONVIERTE EN UN ZOMBI.